domingo, 8 de julio de 2012

El Chino de Godoy Cruz está cada vez más cerca de Núñez

Rojas se tiene fe para enfrentar a Boca.

El Chino de Godoy Cruz está cada vez más cerca de Núñez y con él, Almeyda empezaría a cubrir el enclenque lateral zurdo. Hay otros que esperan al fondo a la izquierda...

Almeyda quiere un equipo agresivo. Confía en los bienes que se producen en casa y se arremanga ante una época ajena a la bonanza. Almeyda no espera lujos de mercado, en todo caso traigan hoces y martillos que hoy, en Núñez, la izquierda está hundida.

El Pelado reconoce que el carril zurdo es la zona a reforzar, “buscamos un lateral y un volante que jueguen por ahí”. Sabe que la famosa Banda Roja luce en su versión más chillona, que ese andarivel está en rojo, y, en la paleta de colores, parte de la cura no dista tanto de la enfermedad. El asunto es que Rojas, Ariel Rojas, se va acercando al Monumental.

El Chino ya expresó que le “encantaría jugar en River” y las negociaciones avanzaron en las últimas horas. De los sondeos telefónicos, los dirigentes millonarios pasaron a pactar para los próximos días un encuentro formal con Mario Contreras, de licencia como presidente bodeguero pero aún influyente en las operaciones de Godoy Cruz, el dueño del 100% de la ficha del ex Vélez. Y dentro de este marco optimista, lejos de ser una traba anda el Turco Asad, quien ya manifestó que no le cortará la carrera a Rojas y que, además, le interesa uno de los jugadores prescindibles para Almeyda, por lo que podría tomar forma un trueque a préstamo.

Ahora bien, el DT lo imagina a Rojas como volante o carrilero, no de lateral, donde sólo cuenta con Arano y un Orban negociable. Y en tal sentido, sigue circulando tibiamente la opción de Nicolás Tagliafico, más del agrado dirigencial que Emmanuel Mas, uno de los requeridos por Matías Jesús. “No me llenen de jugadores”, fue otro de los pedidos del entrenador, ya que pretende “apenas unos retoques” y contar con un plantel corto. Sin embargo, los dirigentes opinan que en ese retoque debería haber algún apellido de peso para apaciguar las estrepitosas salidas de Cavenaghi y el Chori. Pero, claro, ante las negativas de D’Alessandro y Belluschi, caídos Lugano y el Chelito Delgado, hoy no aparece dentro de las posibilidades una estrella que sacuda el mercado. Quien más se acerca a dicha condición es Marcelo Estigarribia, el paraguayo que primero debe resolver su situación con la Juve y, luego sí, ver si le cambia el color a una banda renga.

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