Redacción - "Estoy bastante podrido de la telenovela, igual todavía tienen tiempo de hacer un banderazo y pedir que me vaya, porque no firmé aún". La frase pertenece a Matías Almeyda, quien se mostró muy enojado, tras haber confirmado ayer las salidas de Fernando Cavenaghi y Alejandro Domínguez.
"Me dejé presionar, me dejé basurear, pero mi paciencia tiene un límite y si tienen problemas por todo esto todavía están a tiempo", agregó el Pelado.
Sobre el Chori y Cavegol, comentó: “Fui el primer agradecido y lo dije todo el año. Cuando estaba en duda mi continuidad ellos dijeron que no me tenía que ir, soy un agradecido. Pero acá hay algo deportivo y tengo que tomar decisiones, no hay nada personal. Para mí el ciclo se terminó”.
“Acá parece que jugaron el Chori y Fernando nomás y no es así. También lo hicieron otros que dejaron el alma, jugaron lesionados y se entrenaron de la mejor manera”, explicó Almeyda, quien advirtió: "Todavía no soy el técnico de River porque no firmé”.
Además, confesó que charló con Domínguez para ver si aceptaba seguir pero peleando un lugar: "Lo llamé, en la segunda charla le dije que si no tenía problemas de sentarse en el banco, porque consideraba que el podría estar en mi planteo futbolístico. Me dijo que no”.
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